El Cometa Interestelar 3I/ATLAS Asombra a la Ciencia con un Chorro que “Baila” en el Espacio

Observación Astronómica
23/12/2025
Imagen del cometa interestelar 3I/ATLAS (C/2025 N1)
Imagen del cometa interestelar 3I/ATLAS (C/2025 N1). A la izquierda se muestra la imagen original y a la derecha la misma imagen tras un procesado que realza las estructuras de la coma interna. Se aprecia un chorro estrecho de material que emerge desde la región iluminada por el Sol, claramente distinto de la cola de polvo, que se extiende en la dirección opuesta a nuestro estrella. Las flechas indican la dirección de movimiento del cometa y la dirección antisolar. La cruz marca el centro del cometa. Crédito: TTT (Light Bridges) / IAC

Tras haberse acercado a la Tierra el pasado viernes 19 de Diciembre, el cometa 3I/ATLAS sigue ofreciendo nuevos descubrimientos científicos. Un equipo de astrónomos ha logrado un hito en la exploración del espacio: por primera vez se ha detectado un chorro de gas y polvo procedente de un cometa interestelar que, además, oscila de forma periódica, un comportamiento nunca antes observado en un objeto llegado desde fuera de nuestro Sistema Solar.

El descubrimiento fue posible gracias al Two-meter Twin Telescope (TTT), un telescopio robótico situado en el Observatorio del Teide (Tenerife), que fue utilizado para observar el cometa 3I/ATLAS durante una intensa campaña de casi 40 noches entre julio y septiembre de 2025. 

¿Qué es un “jet” y por qué importa?

En los cometas, un jet es un chorro concentrado de gas y polvo que emerge del núcleo (la parte sólida) cuando el calor del Sol derrite hielos y arrastra material al espacio. Estos chorros ya se conocen bien en cometas de nuestro propio sistema, pero ver uno en un cometa interestelar —un visitante que nació en otro sistema planetario— es algo totalmente nuevo. 

Aún más sorprendente es que este jet no es fijo: gira y oscila de manera periódica, como si estuviera “bailando” alrededor del eje del cometa. Esta oscilación permitió a los científicos calcular que el núcleo —el corazón del cometa— gira sobre sí mismo cada 14 a 17 horas aproximadamente. 

Un visitante “sorprendentemente normal”

3I/ATLAS fue detectado por primera vez por el sistema de alerta temprana ATLAS en julio de 2025, cuando ya se acercaba al Sol. Aunque viene de otro sistema estelar y viaja a gran velocidad, los investigadores lo describen como un cometa “extraordinariamente normal”, porque su comportamiento se parece mucho al de los cometas típicos del Sistema Solar. Este nuevo hallazgo da a los científicos una oportunidad única para comparar su actividad con la de cometas que ya conocemos. 

Este tipo de observaciones no solo es espectacular, sino también muy valioso para la ciencia. Como explica uno de los autores del estudio, caracterizar los jets en un cometa interestelar como 3I/ATLAS ayuda a entender cómo funcionan físicamente estos cuerpos que se formaron en otro lugar del universo. Al estudiar cómo expulsan gas y polvo, y cómo rotan, los astrónomos pueden aprender más sobre la composición, estructura y evolución de mundos muy diferentes a los del Sistema Solar. 

Estos resultados abren la puerta a una nueva forma de estudiar visitantes interestelares: no solo como curiosidades que pasan de largo, sino como objetos dinámicos que pueden contarnos secretos de otros sistemas planetarios.

Este vídeo es un secuencia de imágenes del 3I/ATLAS obtenidas durante una noche de observación con el TTT donde se ve el desplazamiento del cometa entre las estrellas.

Actualizado: 23/12/2025