Llegan las Gemínidas: la Última Gran Lluvia de Meteoros del Año
Cada diciembre, cuando el frío arrecia y las constelaciones de invierno dominan el cielo, un espectáculo luminoso irrumpe para despedir el año: la lluvia de meteoros de las Gemínidas. Considerada una de las más fiables y espectaculares del calendario astronómico, vuelve con una actividad que promete deslumbrar a quienes levanten la mirada al firmamento.
A diferencia de la mayoría de lluvias de meteoros —originadas por cometas helados que liberan polvo al acercarse al Sol—, las Gemínidas proceden de un objeto inusual: el asteroide 3200 Faetón. Los astrónomos lo describen como un “cometa rocoso”, un cuerpo similar a un asteroide que se aproxima tanto al Sol que su superficie se fractura por efecto del calor extremo, desprendiendo partículas que forman una tenue cola.
La sonda STEREO de la NASA confirmó la presencia de esa pequeña cola. “La cola brinda evidencia irrefutable de que Faetón eyecta polvo”, explicó el astrónomo David Jewitt, de la UCLA. Este proceso, causado por fractura térmica y desecación de su superficie, respalda que Faetón es efectivamente el origen de las Gemínidas, un rompecabezas celeste que aún continúa desvelando secretos.
Cuándo y Cómo Observarlas
Según Bill Cooke, de la Oficina de Medio Ambiente de Meteoros de la NASA, el máximo de actividad llega entre la noche del 13 de diciembre y la madrugada del 14, cuando podrá verse hasta un meteoro por minuto en condiciones ideales. Entre la medianoche y las 4:00 a.m., con el radiante —ubicado en la constelación de Géminis— en lo alto del cielo, se espera la mayor cantidad de destellos.
Este año, además, las condiciones son especialmente favorables: una fase lunar discreta evita que la luz de la Luna compita con los meteoros más débiles, permitiendo observar incluso las estelas más tenues.

Consejos Para Disfrutar del Espectáculo
- A simple vista: no se recomienda usar telescopios o prismáticos; los meteoros cruzan todo el cielo.
- Buscar oscuridad: alejarse de las ciudades permite ver más estelas.
- Adaptarse a la noche: la vista tarda entre 20 y 30 minutos en acostumbrarse a la oscuridad.
- Abrigo imprescindible: las mejores horas coinciden con temperaturas bajas, especialmente en el hemisferio norte.
Una Cita Anual Que Conquista a Todos
Las Gemínidas son visibles desde buena parte del mundo, aunque su espectáculo es especialmente llamativo en el hemisferio norte. Con decenas —e incluso más de un centenar— de meteoros por hora en las mejores condiciones, esta lluvia de estrellas se ha consolidado como una cita ineludible del invierno.

Su ritmo constante y la posibilidad de ver ocasionales bolas de fuego convierten esta lluvia en un recordatorio brillante de la belleza que transita silenciosamente sobre nuestras cabezas. Un espectáculo natural que, una vez más, promete dejar huella.

