Descubren Tres Agujeros Negros Devorando Estrellas Gigantes

Telescopios Espaciales
10/6/2025
Descubren Tres Agujeros Negros Devorando Estrellas Gigantes
Esta ilustración muestra una brillante corriente de material expulsado desde una estrella mientras es devorada por un agujero negro supermasivo. Cuando una estrella se acerca lo suficiente a uno de estos objetos extremos, la intensa gravedad del agujero negro la distorsiona, estirando y comprimiendo su materia. Parte del material estelar forma una espiral incandescente que cae hacia el agujero negro, generando una intensa emisión de energía antes de desaparecer en su interior. Credit: NASA/JPL-Caltech

Los agujeros negros son invisibles a menos que interactúen con materia. Algunos brillan al consumir gas y polvo, mientras otros permanecen latentes hasta que una estrella se acerca lo suficiente para ser devorada. Un nuevo estudio, utilizando datos de la NASA, la ESA y otras instituciones, describe tres casos extraordinarios en los que agujeros negros supermasivos destruyen estrellas masivas, liberando más energía que cien supernovas.

Estos eventos, detectados en galaxias lejanas, representan una nueva clase de fenómenos llamados transitorios nucleares extremos. En cada caso, el agujero negro destruyó una estrella entre tres y diez veces más masiva que el Sol, generando un brillo que persistió durante meses. Estos sucesos iluminan agujeros negros normalmente inactivos, permitiendo estudiarlos en detalle.

Uno de los eventos, apodado "Barbie" (por su identificador ZTF20abrbeie), fue descubierto en 2020 por la Instalación Transitoria Zwicky en California. Los otros dos fueron detectados por la misión Gaia de la ESA en 2016 y 2018. El Observatorio Swift de la NASA fue clave para confirmar que estos eventos estaban vinculados a agujeros negros, gracias al seguimiento del comportamiento de la luz en rayos X, ultravioleta y óptico.

Los datos de la sonda WISE (reactivada como NEOWISE hasta 2024) también ayudaron a caracterizar el polvo circundante en estas regiones galácticas. Además, telescopios terrestres como los del Observatorio Keck, ATLAS, Pan-STARRS y Catalina aportaron observaciones fundamentales.

La luz de alta energía emitida por estos eventos tarda más de 100 días en alcanzar su pico y más de 150 en reducirse a la mitad, lo que ofrece una valiosa ventana para su estudio. “Estos eventos nos permiten detectar agujeros negros que de otro modo serían invisibles”, explicó Jason Hinkle, autor principal del estudio y estudiante de posgrado en la Universidad de Hawái, quien continuará su investigación como becario Hubble.

Este descubrimiento complementa hallazgos recientes del Telescopio Espacial James Webb sobre el crecimiento de agujeros negros en el universo primitivo. Dado que solo el 10 % de ellos consume activamente materia, los transitorios nucleares extremos son una vía clave para detectarlos. Gracias a su capacidad infrarroja y amplio campo de visión, el futuro Telescopio Espacial Nancy Grace Roman, previsto para 2026 o 2027, podría captar estos eventos ocurridos hace más de 12.000 millones de años, arrojando nueva luz sobre la evolución de las estrellas, galaxias y agujeros negros.

“Estos tres eventos pueden servir como modelo para identificar muchos más en el futuro”, concluyó la astrónoma Anna Payne, coautora del estudio.

Actualizado: 10/6/2025